lunes, 14 de octubre de 2013

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REDES SOCIALES FORD. Te dice El motor Ford EcoBoost 1.0 surge de una configuración de cilindros que, visto desde fuera, se pensaría que no es la más acertada. Un pequeño motor tricilíndrico que cabe en una hoja de tamaño A4 pero al que se le han aportado soluciones tan ingeniosas que lo hacen parecerse a sus hermanos de cuatro cilindros, pero mejorados. Para empezar y como comentábamos, el problema inherente de los motores de tres cilindros es su falta de equilibrio que se traduce en unas mayores vibraciones, un menor confort y un sonido áspero. Para evitar estos problemas, en vez de recurrir a un eje de equilibrado contrarotante que las eliminase, se optó por desequilibrar a propósito tanto el volante de inercia como la polea. Este desequilibro compensa el giro del tricilíndrico sin necesidad de incorporar piezas nuevas que al final siempre se traducen en mayores fricciones y pérdidas de energía.

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