Guardalo
lo más limpio que puedas, por dentro y por fuera. Si es posible con un tratamiento
de cera o teflon, para evitar
que el polvo se adhiera a la pintura, resguardado del sol y el agua, y bajo
techo.
- Evitá dejar en el interior elementos que se descompongan con el calor o el paso del tiempo
(pilas, alimentos, banditas elásticas), y que pueden manchar o causar mal olor.
- Que el aire circule: si el auto va a estar en un
lugar seguro y bajo techo (una
cochera con vigilancia), que una de las ventanillas quede baja y permita
la ventilación, para evitar humedad.
- Dejá accionado el freno de mano,
algo que además de ser una medida de seguridad, permite mantener libre de
corrosión el mecanismo que lo hace funcionar y aplica la presión necesaria
sobre las pastillas de freno (tanto en autos con tambor o disco); además, en
caso de ser un auto con caja automática, evita que se fuerce la transmisión
(aunque la caja esté en la posición Parking).
- Nunca está de más colocar elementos de protección
extra como tacos en los neumáticos (en el caso de que haya una pendiente)
o defensas (gomas en desuso) entre las paredes y el auto, para evitar golpes.
- Chequeá que los niveles de líquidos sean los adecuados,
y si están por debajo, completálos.
- Mangueras y depósitos, así como correas, pueden resquebrajarse
con el paso de tiempo; recordácontrolar
su estado antes
de volver a poner en marcha el auto.
Dejá
inflados los neumáticos siguiendo las indicaciones del
fabricante y no dejes el tanque de combustible vacío para evitar condensación. Cuidado: el
combustible se pudre pasado determinado tiempo y es probable que pierda parte
de sus propiedades o que termine obstruyendo el sistema de inyección o
carburador de tu auto. Si la nafta o gas oil estuvo varios meses en el
depósito, antes de ponerlo en marcha, reemplazá el combustible.
- Antes de despedirte de tu auto por un buen tiempo recordá desconectar
la batería removiendo
al menos uno de los terminales o bornes. De esta manera evitarás que se
produzcan cortocircuitos; eso sí: tené presente que si el auto tiene alarma,
perderá esta protección.
Poné en marcha el motor una vez cada 15 días: esto es para mantener todos los circuitos lubricados. Si
vos no estás, decile a alguien responsable que lo haga.
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